Abstract:
La tuberculosis (TB) sigue siendo una de las enfermedades transmisibles más mortales y en el 2015 continua entre las 10 principales causas de muerte en todo el mundo. A nivel mundial, se estimó que 10.4 millones de nuevos casos de TB, de los cuales 5.9 millones (56%) entre los hombres, 3.5 millones (34%) entre las mujeres y 1.0 millones (10%) entre los niños en el 2015.1 Se estima que el diagnóstico y tratamiento eficaces de la TB han permitido salvar 43 millones de vidas entre 2000 y 2014. 2 En el Perú anualmente se notifican alrededor de 27 mil casos nuevos de enfermedad activa y 17 mil casos nuevos de tuberculosis pulmonar frotis positivo, somos uno de los países con mayor cantidad de casos de tuberculosis en las Américas. Por otro lado, la emergencia de cepas resistentes ha complicado las actividades de prevención y control, en los últimos dos años en el país se han reportado más de 1500 pacientes con tuberculosis multidrogo resistente (MDR) por año y alrededor de 80 casos de tuberculosis extensamente resistente (XDR) por año. La resistencia a los medicamentos antituberculosos es un factor que ha complicado las acciones de control de la tuberculosis y se ha convertido en un importante problema emergente de salud pública en varios países. En los últimos 10 años pasamos de tener porcentajes de abandono por debajo de 4% en el periodo 2001-2006 a tener casi 7% de abandono par la cohorte de los años 2011 al 2013, situación que requiere una evaluación urgente, que permita fortalecer la estrategia para disminuir esta situación ya que estos pacientes pueden seguir trasmitiendo la enfermedad en la comunidad.3 La mayor parte de los problemas de salud están directamente relacionados con los determinantes sociales. Sin embargo, en las políticas de salud han predominado las soluciones centradas en el tratamiento de las enfermedades, sin incorporar adecuadamente intervenciones sobre el entorno social. 4 Un abordaje familiar en la atención sanitaria podría proporcionar una mayor capacidad para comprender la enfermedad al considerar el hecho de que una familia con un funcionamiento adecuado, o familia funcional, puede promover el desarrollo integral de sus miembros y lograr el mantenimiento de estados de salud favorables en éstas. Así como también que una familia disfuncional o con un funcionamiento inadecuado, debe ser considerada como factor de riesgo, al propiciar la aparición de síntomas y enfermedades en sus miembros.5 Las prioridades nacionales de investigación de salud 2015 - 2021, sitúan entre las cinco principales prioridades regionales a la tuberculosis.6 En este trabajo nos centramos en el tipo de investigación de desarrollo de soluciones o intervenciones que ayuden a prevenir o mitigar problema de salud abordado. Consideramos que conociendo la importancia de una adecuada funcionalidad familiar para la adherencia al tratamiento anti TBC, podemos concientizar a las autoridades de salud, considerando los lineamientos de política del sector salud de disminuir y controlar las enfermedades transmisibles, para que establezcan medidas formales dirigidas al entorno social y familiar en los programas establecidos, de esta manera se contribuya en la disminución del porcentaje de abandono del tratamiento. Considerando las políticas de salud al 2021 con un enfoque en la atención primaria, persona y familia se ve necesidad de establecer nuevas medidas dirigidas al trabajo. colaborativo y de corresponsabilidad entre el paciente, la familia y el profesional de salud. Los médicos de familia como primer contacto, atención continua del paciente y su entorno, basándonos en una atención integral debemos resaltar estos aspectos que son importantes para su recuperación y de esta manera proponer la implementación de estos programas dirigidos al entorno familiar.